La grabación de la reciente intervención de Irene de Miguel en la Asamblea de Extremadura, en el inicio de la nueva legislatura, debería correr por todos los rincones informativos como una pieza de literatura política ejemplar, en estos tiempos de confusión y propaganda. Lo que le recordó Irene a María Guardiola, la nueva presidenta extremeña, posiblemente hizo que a esta le corriera un sudor frío y tuviera la mirada perdida durante unos minutos que le debieron parecer siglos. Extremadura pasó de la valentía de una mujer con independencia de criterio a la sumisión más humillante ante un capataz que, a la par que se burla de ella, se atreve a hablar del valor de la palabra…

Vara se impuso un perfil bajo. Quiere facilitar un traspaso de poderes sincero y dar la información que puedan demandar de él. Intentó ser responsable hasta el final. Lo que no impidió que dijera algunas cosas que los entrantes deberían tener muy en cuenta si fueran inteligentes.
El líder de VOX puede que sea uno de los más inteligentes de su partido, lo cual no le va a impedir tener que llevar a cabo las políticas más reaccionarias que le impongan. Creo que va a mandar en el gobierno del PP mucho más de lo que estos se imaginan… Tiempo habrá de hablar de él.
Con todo, es la figura de Irene de Miguel la que me impulsa a escribir esta crónica resumida y esquemática. La grabación de su intervención debería correr por todos los rincones informativos como una pieza de literatura política ejemplar, en estos tiempos de confusión y propaganda.
VALENTÍA O SUMISIÓN
Lo que le recordó Irene a Guardiola posiblemente hizo que a esta le corriera un sudor frío y tuviera la mirada perdida durante unos minutos que le debieron parecer siglos. Extremadura pasó de la valentía de una mujer con independencia de criterio a la sumisión más humillante ante un capataz que, a la par que se burla de ella, se atreve a hablar del valor de la palabra…
Irene hizo gala de un análisis del momento político regional, nacional e internacional que pocos políticos tienen tan bien construidos.
Por si fuera poco, su colega de Andalucía aún se jactó más al decir que Guardiola tuvo que tragarse sus palabras. No obstante, nada de esto fue suficiente para alguien que quería ser presidenta de la Junta de Extremadura a cualquier precio. Este hecho ha sido vergonzoso para ella, pero sobre todo para los extremeños, que vamos a tener que soportar lar burlas de las que será objeto a lo largo de un mandato que no sabemos si podrá durar cuatro años.
Irene hizo gala, además, de un análisis del momento político que vamos a vivir, tanto a nivel regional como nacional e internacional, que pocos políticos actuales tienen tan bien construidos. Con ironía y humor fue repasando lo que nos espera y les fue recordando al PP y a VOX tanto lo que dicen acerca de cada una de las cuestiones pendientes, como lo que hacen en aquellos sitios en los que están gobernando juntos, al tiempo que les lanzaba preguntas que ninguno se atrevió a responder en las réplicas. Así, problemas como el del agua (que va a ser terrorífico), el del clima, el del territorio o el de la biodiversidad, unidos al de la igualdad, el paro, los órganos de participación pública, la reforma fiscal (para los ricos), la vivienda (¡van a crear una oficina para las gestión de la ocupaciones, que casi no existen en Extremadura!) fueron recorriendo su discurso, para terminar diciéndoles a los inductores del miedo que la ecología no es ideología sino que se basa en la ciencia, a fin de que dejen de meterse con “los malvados ecologistas” de los que la sociedad tendrá que acordarse, y ojalá no sea demasiado tarde…
Vara se impuso un perfil bajo. Quiere facilitar un traspaso de poderes sincero y dar la información que puedan demandar de él, e intentó ser responsable hasta el final.
Terminó augurándoles una oposición implacable con el propósito de evitar que lleven a Extremadura a una situación de retroceso justo cuando empezaba a vislumbrarse una nueva etapa llena de esperanza.
LA NUEVA SOCIEDAD
Tener en una región a alguien que le cabe en la cabeza el discurso de la nueva sociedad que hemos de alumbrar entre todos es una nota de esperanza, porque la política da muchos virajes y los que hoy están exultantes puede estar en el disparadero antes de lo que imaginan.
Extremadura pasó de la valentía de una mujer con independencia de criterio, como Irene de Miguel, a la sumisión más humillante de María Guardiola ante su capataz.
En conclusión, les recomiendo que escuchen el discurso de Irene, no ya por lo pedagógico que resulta su análisis para mucha gente que ha creído las promesas de los que van a arreglarlo todo (como las vacas de Castilla y León), sino también porque lo hace sin dogmatismos. Sus predicciones las vamos a ver hechas realidad en Extremadura a no mucho tardar.
Saber que en nuestra tierra hay personas con su formación y su experiencia después de ocho años de vida política (en la que, ciertamente, han cometido errores, aunque son conscientes de ello) es algo importante en momentos en los que las crisis se van a suceder en esta sociedad en la que se van a producir grandes cambios. Hace falta gente como ella, que tiene claros tanto los problemas como las soluciones que habrá que adoptar, además de capacidad de diálogo para concertar acuerdos entre quienes pueden contribuir a esas transformaciones con la mirada hacia adelante y sin regresar a situaciones que, sin duda, nos llevarán al desastre.
He discrepado y discutido de y con Irene de Miguel en algunos momentos en que la falta de pragmatismo y el radicalismo ingenuo de su formación les llevó a cometer ciertos errores. Luego, en la sesión de investidura, he visto a una mujer joven, madura y preparada, que tendrá que desempeñar un papel importante en los momentos difíciles que nos esperan. ¡Cómo me habría gustado verla junto a Vara liderando un gobierno de coalición! La experiencia de él y la firmeza de ella firmeza habrían sido trascendentales. Sin embargo, la política tiene estos vaivenes. Por ahora solo me queda recomendar su discurso en todos los rincones a los que pueda llegar.
(Juan Serna Martín, exconsejero de la Junta de Extremadura, es un destacado intelectual y activista medioambiental, escritor y columnista, Premio Nacional de Medio Ambiente 2022).
SOBRE EL AUTOR
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