martes, 19 marzo, 2024
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Durísimo varapalo policial a Zoido y al Gobierno

El sindicato mayoritario de mandos culpa al ejecutivo de la situación actual

El Sindicato Profesional de Policía (SPP), al que pertenecen mayoritariamente los mandos de la Policía Nacional, entregó ayer en el Ministerio del Interior una carta dirigida personalmente al ministro con motivo de los recientes sucesos de Cataluña. En ella se denuncia “el uso político” que las instituciones catalanas han hecho de los atentados. y se acusa al Gobierno de “dejadez de sus responsabilidades legales”, por haber “olvidado que la Seguridad Pública es competencia exclusiva del Estado”. PROPRONEWS ofrece a sus lectores toda la información y reproduce el citado escrito en rigurosa exclusiva.

Después del duro comunicado del SUP y la AUGC del pasado día 22 de agosto, en el que ambas organizaciones profesionales de la Policía y la Guardia Civil denunciaban asimismo la exclusión de ambos cuerpos en los atentados de Barcelona, y que reprodujimos en nuestro periódico (https://www.propronews.es/generalitat-cataluna-posibles-dolo-e-indicios-criminalidad/), el escrito del SPP, sindicato policial en el que son mayoritarios los mandos, representa no solo un escalón más en el enfrentamiento de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado con el Gobierno por la mala gestión de este en materia de seguridad y de preservación de las correspondientes competencias estatales en todo el territorio, sino, sobre todo, la elevación del conflicto a un nivel nunca visto hasta ahora, porque en este caso son los mandos policiales los que hablan y porque los términos en los que se manifiestan son extremadamente duros.


El SPP entregó ayer una severa carta al ministro del Interior.


 

El sindicato acusa al Gobierno de “dejadez de sus responsabilidades legales”.


La carta de tres folios, con el membrete del SPP y fechada el 23 de agosto, dirigida a D. Juan Ignacio Zoido Álvarez – Ministro del Interior, entró ayer a las 13:33 horas en el registro del ministerio, con el número 61240, y está firmada por José Ángel Gutiérrez Torres, vicepresidente nacional del SPP.

En relación con los atentados de Cataluña, la carta manifiesta que “desde el Sindicato Profesional de Policía, mayoritario en las Escalas de Mando de la Policía Nacional, le queremos poner de manifiesto que no se ha valorado lo suficiente el trabajo de los miembros de la Policía Nacional”. Tras felicitar seguidamente a los Mossos d´Esquadra, a los que la misiva califica de “auténticos profesionales de la seguridad comprometidos con los ciudadanos a los que sirven”, el escrito pide “el mismo reconocimiento” para quienes, “con su callado trabajo de meses e incluso años en el seno de la Policía Nacional, han contribuido a que se cuente con información suficiente como para poder apoyar en un determinado momento a otras policías. No estaría de más que usted, como máximo responsable de la seguridad en nuestro país, defienda con justicia el trabajo de todos”. La carta protesta por “el uso político que han efectuado las instituciones y los responsables políticos catalanes de la gestión de los atentados”, y expresa “el enorme pesar y la gran preocupación existente entre los mandos de la policía Nacional” por ese uso. Pesar y preocupación que aumentan “sobre todo porque usted como Ministro del Interior y también el resto de los miembros del Gobierno de la nación lo han permitido”.


“Ustedes han olvidado que la Seguridad Pública es competencia exclusiva del Estado”.


Pero lo peor viene a continuación. La carta denuncia varias cosas gravísimas. La primera es que el Gobierno ha permitido que los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, que son los únicos que pueden actuar por ley en materia de seguridad pública en todo el territorio nacional, hayan quedado relegados desde hace años en esta materia en determinadas comunidades españolas. “Desde hace demasiados años –señala el escrito- venimos denunciando el quebranto sistemático de las previsiones de la Ley Orgánica de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en el ámbito del reparto de competencias. No se nos ha hecho caso nunca. Y ahora, con dejadez de sus responsabilidades legales, el Gobierno ha permitido que se haya ninguneado y excluido a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado de la gestión inmediata de unos hechos que afectan claramente a la administración general de la seguridad ciudadana. Y es que (el texto de la carta pasa a negrita) han olvidado que la Seguridad Pública es competencia exclusiva del Estado. Lo dice nada menos que una Ley Orgánica”.


“El Gobierno lleva más de cinco años mirando para otro lado simplemente por conveniencias políticas”.


A continuación, el escrito interpela directamente a Zoido y le dice: “usted lleva poco tiempo en el cargo de Ministro del Interior y entendemos que su responsabilidad en todo esto es limitada, al menos desde un punto de vista temporal. Pero no la del Gobierno del que usted es miembro, y que lleva más de cinco años mirando para otro lado simplemente por conveniencias políticas. De igual manera son responsables los gobiernos anteriores y los ministros del Interior que le han precedido y que hicieron exactamente lo mismo. Le pedimos que sea usted valiente y rompa con esta dinámica, ya que la seguridad no es una moneda de cambio en el “mercadeo parlamentario”.

QUIEBRA DE LA CONFIANZA

El escrito resalta a continuación la pérdida de confianza de los agentes y sus mandos, al decir que, “lejos de ser este un asunto estrictamente político, es de tal gravedad, que ha supuesto una quiebra de la necesaria confianza que debe existir entre los responsables de la seguridad en España y los integrantes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Los policías no nos merecemos un ninguneo institucional de este calibre, que afecta directamente al ánimo con el que nos enfrentamos al trabajo diario. Por ello le exhorto a adoptar medidas urgentes para que esta situación se revierta en el futuro. De lo contrario, le pido que tanto usted como los restantes responsables políticos de su ministerio al menos se abstengan de hacer llamamientos a compromisos, lealtades o esfuerzos extraordinarios a los miembros de la Policía Nacional. Han perdido la legitimidad para hacerlo”.


La carta denuncia “el uso político que han efectuado los responsables políticos catalanes de la gestión de los atentados”.


A continuación, el escrito señala que, “al contrario de lo que ocurre en la Policía Nacional”, los Mossos disponen de medios suficientes y modernos para desarrollar su labor y perciben unos salarios “adecuados”. Tras denunciar que la PN “es la policía civil española peor pagada”, se pide la “equiparación salarial ya”. Luego se incide en la idoneidad de los medios, y se dice que “estamos en una situación precaria. Vehículos antiguos, insuficiencia de chalecos y de medios de autodefensa, armamento desfasado, formación insuficiente en determinados ámbitos… Se necesita un plan de actuación de manera urgente para dotar a los policías de las mejores herramientas para hacer frente con solvencia a las amenazas que se puedan plantear. Somos garantes de nuestra seguridad, pero también y más importante, de la seguridad de los ciudadanos. Usted lo ha podido ver estos días. Para proteger de manera efectiva al ciudadano hay que contar con los medios adecuados. Lo demás es demagogia”.

DÉFICIT DE EFECTIVOS

Se denuncia seguidamente la escasez de las plantillas: “El déficit endémico de efectivos en la Policía Nacional es otro problema decisivo a la hora de poder dar la mejor respuesta a acontecimientos extraordinarioa. La responsabilidad de los distintos gobiernos es clara dada la histórica ausencia de un plan a medio y largo plazo, para reponer las obligadas jubilaciones de policías nacionales que se han producido en los últimos años. Pero es su deber trasladar a los restantes miembros de su Gobierno, en especial al Ministro de Hacienda, la necesidad urgente de aumentar significativamente la oferta de empleo en la Policía Nacional”.


“Usted como Ministro del Interior y también el resto de los miembros del Gobierno de la nación lo han permitido”.


La carta es muy relevadora, pues pone de manifiesto el muy negativo estado de ánimo de la Policía Nacional, agentes y mandos, situación extensible a la Guardia Civil, y porque los términos en los que está escrita son de una dureza sin precedentes. En cincuenta años de ejercicio profesional no habíamos visto nunca un escrito tan duro dirigido al ministro del Interior y al Gobierno, por los representantes de los agentes y mandos mayoritarios del citado sindicato policial.

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