Legislar sobre la nada es tarea de políticos que carecen de bagaje y entidad para desempeñar sus cargos y no saben cómo justificar sus sueldos, ni saben lo que hay que hacer, ni tienen sustancia para hacerlo. El ala podemita del gobierno ya no sorprende a nadie con unas ocurrencias tan disparatadas que ya solo mueven a risa. Las últimas, declarar “núcleo zoológico” a los hogares que tengan más de cinco mascotas y crear seis registros donde deberán inscribirse los dueños de animales, en función de las delirantes condiciones que impone el nuevo proyecto de ley de Ione Belarra. El camarote de los hermanos Marx se queda pequeño.
Lo peor que le puede pasar a un político es que la gente se ría de él, que la ciudadanía le tome a chacota. Pues eso es lo que les está pasando a los ministros de Podemos, cuyas inefables medidas, si antes irritaban a los electores, ahora ya solo los mueven a risa.
La cantidad de medidas absurdas de los ministros podemitas rebasa ya toda imaginación.
Esta semana se descolgaba la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030 (¿dónde estará ella no dentro de diez años, sino dentro de dos, o tal vez de unos meses?), Ione Belarra, con un proyecto de Ley de Protección y Bienestar Animal, sin duda necesario para evitar ciertas circunstancias dañinas para los animales, pero que tanto intenta protegerlos y en tan domésticos vericuetos se mete que termina convirtiéndose en una caricatura de la normativa que de verdad haría falta.
La nueva ley -esperemos que su paso por el consejo de ministros y por el Congres la limpie de bobadas, si es que llega a promulgarse algún día-, entre otras aberraciones propone:
* Declarar “núcleo zoológico” (NZ) todo hogar en el que haya más de cinco animales. De modo que una persona que tenga seis pajaritos en casa, deberá darse de alta e inscribirse en el correspondiente registro nacional que se cree al respecto.
* Crear un registro nacional de animales de compañía para los hogares con menos de cinco mascotas por unidad.
* Crear un registro de NZ.
* Crear un registro de profesionales del comportamiento animal.
* Crear un registro de personas inhabilitadas para tener mascotas.
* Crear un registro de entidades de protección animal.
* Superar un curso formativo obligatorio por toda persona que quiera tener un perro.
* Eliminar el registro de razas peligrosas de perros, para “evitar el racismo” contra los animales.
* Prohibir la exhibición y venta de animales en tiendas.
* Prohibir la participación de animales en romerías, cabalgatas y similares (adiós al Rocío y a las cabalgatas de Reyes, entre otras muchas celebraciones con participación animal).
* Crear un Observatorio Estatal de Protección Animal.
* Crear en cada Comunidad Autónoma un Centro Autonómico de Protección Animal.
* Crear un Centro de Protección Animal en cada municipio mayor de 5.000 habitantes.
* Impedir a los mendigos tener animales.
* Multas de hasta 600.000 euros para las infracciones más graves de estas medidas.
Falta por saber qué cuerpo de “Inspectores del Bienestar Animal” se encargará de vigilar y hacer cumplir tales normas, y cuántos componentes tendrá (harán falta, como poco, decenas de miles de nuevos funcionarios), y cuántos centenares o miles de millones de euros costará todo esto al erario público.
UNA CHORRADA MÁS
No me gusta utilizar expresiones vulgares en lo que escribo, pero es que no encuentro otra palabra más adecuada que CHORRADA para calificar las genialidades del ala podemita del gobierno (y, a veces, también del ala socialista, aunque ahora menos, después de la defenestración del ínclito Iván Redondo). Chorradas que se suceden una tras otra y que, si antes sorprendían y enfadaban a la ciudadanía, ahora ya solo provocan la unánime carcajada nacional, aunque muchas de estas propuestas llevan cargas de profundidad que afectan a la esencia de nuestra democracia y aunque este tipo de fiebre legisladora invade muchas veces el sagrado terreno de la privacidad y de las libertades individuales de los ciudadanos.
Se crean seis Registros para los millones de hogares donde hay o ha habido mascotas en nuestro país.
La nueva CHORRADA, viene a sumarse a otras como:
* La creación de la Dirección General de Derechos de los Animales.
* La autodeterminación de género, de modo que nadie es hombre, mujer o lo que sea, hasta que el interesado lo decide.
* La pérdida por los padres y tutores de su autoridad y potestad sobre sus hijos o tutelados menores.
* La corrupción del idioma español con expresiones como “ellos, ellas y elles”.
* La sugerencia ministerial de no comer carne.
* La eliminación de las carreras universitarias de tres años.
* La prohibición de las miradas impúdicas.
Y muchas otras chorradas que cada lector y lectora recordarán fácilmente, como la “toma” del movimiento “CHOCHOPOWER” del Instituto de la Juventud en Madrid, el 8-M de 2020, a costa del erario público, cuando la institución dependía de Pablo Iglesias.
Los plazos que se fijan los ministros podemitas para que la nueva ley entre en vigor es para “antes de 2023”, pero, con un poco de suerte, entonces ya no estarán ellos en el gobierno.
(José Mª Pagador es periodista y escritor, y fundador y director de PROPRONews. Sus últimos libros publicados son 74 sonetos (poesía, Fundación Academia Europea de Yuste), Los pecados increíbles (novela, De la Luna Libros), Susana y los hombres (relatos, Editora Regional de Extremadura) y El Viaje del Tiburón (novela, Caligrama Penguin Random House).
SOBRE EL AUTOR
José Mª Pagador y Rosa Puch, 100 años de periodismo
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