El pollo, como hemos visto otras veces en esta sección, es una carne universal, que se consume en todas las culturas y latitudes, ajena a los prejuicios religiosos, y que, por ser tan saludable, está recomendada para todas las edades. Además, por su abundancia y su precio razonable, es un ingrediente que ayuda en esta cuesta de enero, en la que todo está tan caro. Pero no por sencillo, el pollo tiene que dar lugar a un plato elemental. La receta de hoy es un buen ejemplo.
Marchena, Sevilla.-
El pollo es de esos alimentos que admite toda clase de preparaciones, desde las más sencillas -en churrasco, a la plancha, al horno, frito- a las más elaboradas. Hoy nuestro chef nos sugiere esta riquísima receta, que aúna perfectamente la suavidad del ave con la melosidad de la crema de puerros y el punto exótico del brócoli, todo ello arropado por la Mornay, una salsa de origen francés, pero que se puede elaborar con diferentes toques según el país. Se trata de una bechamel, con la diferencia de que a esta se le adiciona huevo y queso.
Todo queda tan claro como siempre en el diagrama de flujo que aporta nuestro chef. Buen provecho.
(Francisco Javier Segovia Montero es cocinero, gastrónomo y profesor, fundador de la Escuela de Gastronomía de Marchena).
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