Conocida nuestra crítica hacia ciertas cosas injustas que no deberían estar pasando, ha llegado el momento de poner en evidencia a aquellos que las producen. Sobran en este nuevo mundo los psicópatas, sociópatas y manipuladores, que ya no podrán cubrirse detrás de ese rostro engañoso que oculta sus verdaderas intenciones. Como bien describe Platón en “La caverna”, la realidad que percibimos “está siendo manipulada constantemente y vemos sólo la parte que interesa a unos pocos; es una realidad creada, donde vemos a esos personajes actuar, como si de titiriteros o actores se tratara, haciendo acopio de sus engaños y sus mentiras”. En este periódico queremos ser partícipes y difusores de la nueva era de la consciencia humana, un despertar imprescindible en este nuevo año que acaba de dar comienzo.
Cádiz.-
La única manera de no ser manipulados es controlarnos a nosotros mismos. Si comprendes y asumes lo que aquí decimos, podrás ser el escultor-programador de tu propio cerebro. Es hora de saber lo que realmente somos y cómo percibimos la realidad que se nos muestra.
A un nivel físico podemos definirnos como “energía que fluye dentro de espacios interneuronales, avanzando entre la materia gris que se distribuye por todo el sistema nervioso”. Y nos percibimos a nosotros mismos como “un estado de consciencia que alcanza su máximo esplendor, como alma, en el córtex cerebral”. Lo más increíble es que podemos crear interconexiones sinápticas, a voluntad, para movernos e influir sobre todas las regiones del cerebro, incluidos los canales de la mente. Quizá somos Dioses dentro de nuestro propio universo, pues podemos modelar procesos vitales, como los del pensamiento, simplemente con nuestra imaginación. Además, cuanto más ejercemos nuestro poder creativo, mayor cantidad de interconexiones neuronales creamos y más capaces nos volvemos, en un fenómeno llamado neuro plasticidad cerebral.
Es hora de saber lo que realmente somos y cómo percibimos la realidad que se nos muestra.
Nuestra consciencia está activa desde antes de nacer. Lo está en esencia incluso antes de que se haya formado el cerebro, entre neuronas del corazón. En ella nace la imaginación humana, la cual se considera más importante que el conocimiento. Hoy en día sabemos que, al maginar, creamos una confrontación a los actos reflejos del pensamiento, donde la mente capta, como un lienzo multidimensional, “fracciones de consciencia imaginativa”, pareciéndole tan reales, que quedan plasmadas en ésta como parte de la realidad. A esto lo llaman “visualización consciente o creativa”. También le llaman meditar, y sirve para crear voluntariamente la vida que soñamos. Pero para que esto funcione, hemos de imaginar con tal realismo que, desafiando a nuestros sentidos, parezca estar sucediendo. Así la mente creará procesos de acción en el cuerpo, el cual, por “motivación sistémica”, irá construyendo nuestros sueños.
Te recomiendo que seas paciente, pues a veces la materialización toma un tiempo y se debilita si pierdes la fe en tus sueños.
Cuanto más ejercemos nuestro poder creativo, mayor cantidad de interconexiones neuronales creamos y más capaces nos volvemos.
Recordemos además que la creatividad humana tiene un grado de consciencia que puede disminuir hasta ser reducida a nada, perdiéndose además la materia gris que la forma. Pero confía en la neurogénesis; harás migrar células pluripotenciales de las cavidades cerebrales para convertirse en neuronas nuevas. Para promover esto, es vital tener buenos hábitos de vida, como ejercitarse o entrenarse. La inteligencia es la habilidad de escoger lo mejor en cada momento, y para lograr eso tenemos que integrar correctamente la inteligencia con las emociones en nuestra exquisita red neuronal situada en el extremo del córtex, junto al tálamo.
La inteligencia es la habilidad de escoger lo mejor en cada momento.
Si desconocías todo esto, posiblemente te hayas identificado con tu mente, creyendo que eres un personaje y olvidando que ocultas en tu interior ese gran tesoro, que es tu propio ser. Pero no te preocupes, nos pasa a casi todos; desde la infancia algo nos despista.
Nos educan bajo condicionantes y creencias externas; nos manipulan fácilmente en una especie de hipnosis colectiva donde captamos, con nuestro sistema reticular o atención, ideas y pensamientos, los cuales quedan fijados, mediante neuronas espejo en nuestro inconsciente, creando una realidad confusa y carente de sentido. Pero… ¡basta ya! ¡Se acabó la confusión!
Usa el poder de la imaginación y de la voluntad para crear la vida que deseas e intégrala en la realidad colectiva, cumpliendo con las leyes, las normas y las reglas. Serás un ciudadano de la nueva era.
(Carlos Martínez Correa es un profesional multidisciplinar experto en mentalismo, nutricionismo y calidad de vida).
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