martes, 19 marzo, 2024
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Contradicciones y retos de la Humanidad en el tiempo presente

Una nueva educación debe ser uno de los motores de un cambio urgente e imprescindible

La educación, la ciencia, la tecnología, la innovación y el emprendimiento son fundamentales, para transformar la sociedad actual en un sociedad más justa, más equitativa, más solidaria, más próspera y más sostenible, por ello no podemos analizarlos sin analizar el contexto de donde se derivan los grandes retos y desafíos de la humanidad, las grandes contradicciones como la injusta distribución de la riqueza.

El doctor Telémaco Talavera.
El doctor Telémaco Talavera.

En el mundo actualmente existen grandes contradicciones; por un lado, exorbitantes riquezas, pero altamente concentradas y con una gran desigualdad global. Según el Informe anual 2020 sobre la Desigualdad Global, presentado por Oxfam Intermón en ocasión de la 50ª Edición del Foro Económico Mundial, conocido como Foro de Davos, realizado el 21 de enero 2020 en Davos Klosters (Suiza), las conclusiones no pueden ser más terribles:

1).- El 1% de la población posee más del doble de riqueza que 6.900 millones de personas.

2).- Casi la mitad de la humanidad vive con menos de 5.50 dólares por persona y día.

3).- Tan solo 4 centavos de cada dólar recaudado se obtienen a través de impuestos sobre la riqueza.

4).- Los súper ricos eluden hasta el 30% de sus obligaciones fiscales.

5).- Hay 258 millones de niños y niñas sin escolarizar: uno de cada cinco.

6).- Por cada 100 niños que están sin escolarizar, hay 121 niñas a las que se les priva del derecho a la educación.

7).- Cada día, 10.000 personas pierden la vida por no poder costearse la atención médica.

8).- Cada año, 100 millones de personas se ven arrastradas a la pobreza extrema por los gastos médicos que deben afrontar.

9).- Los 22 hombres más ricos del mundo tienen más riqueza que todas las mujeres de África.

10).- El trabajo de cuidados ejercido por mujeres equivale a 10,8 billones de dólares anuales en la economía mundial.

En este sentido, el expresidente de los Estados Unidos, Barack Obama, en su discurso de despedida, el 10 de enero de 2017, en Chicago, dijo: “Pero la cruda desigualdad también es corrosiva para nuestros principios democráticos. Mientras que el uno por ciento superior ha amasado una parte mayor de la riqueza y los ingresos, muchas familias, en el interior de las ciudades y condados rurales, han quedado atrás…” Y según ACNUR prevalecen diferentes tipos de desigualdad: social, económica, educativa, de género y legal.


El 1% de la población posee más del doble de riqueza que 6.900 millones de personas.


1.300 MILLONES DE POBRES

Según un informe presentado por la ONU el 11 de julio 2019 en Nueva York, alrededor de 1.300 millones de personas en el mundo viven en situación de pobreza multidimensional. La mitad de esas personas son menores de 18 años y una tercera parte, menores de 10 años. Según el mismo informe, uno de cada seis adultos es multidimensionalmente pobre, y uno de cada tres niños; también menciona que las diferencias entre las zonas rurales y urbanas es también muy grande, ya que 1.100 millones de personas viven en situación de pobreza multidimensional en zonas rurales, mientras que 201 millones lo hacen en ciudades.

Lujo para ricos. Dubai. J.M. PAGADOR
Lujo para ricos. Dubai. J.M. PAGADOR

Todo esto convive con avances inimaginables, vertiginosos y exponenciales de la ciencia y la tecnología (biotecnología, nanotecnología, infotecnología, cognotecnología, ciencia espacial), mientras millones de personas padecen de hambre, pobreza y extrema pobreza, desnutrición o mal nutrición, migraciones, racismo, xenofobia, violencia en sus diversas expresiones, niveles, tipos y consecuencias; terrorismo; injusticia, inequidad, desigualdad, corrupción, nepotismo, etc.; y esto incluso en los países llamados desarrollados, aunque en menor grado que en los países llamados subdesarrollados o del Tercer Mundo.


Los 22 hombres más ricos del mundo tienen más riqueza que todas las mujeres de África.


A esta lista de males hay que sumar, además, el cambio climático que afecta a la humanidad entera, las cruentas guerras fundadas en su mayoría en falsos argumentos, pero que en la realidad muchas de ellas son para apropiarse de los recursos naturales y generar enormes e inhumanas ganancias a la industria militar, así como el terrorismo, narcotráfico y crimen organizado, que son males que carcomen al mundo, más la proliferación de armas nucleares que mantienen amenazadas a millones de personas y al planeta entero.

A la misma vez, en el mundo actual la Internet y las redes sociales son una fuente casi ilimitada de conocimientos e información, de gran utilidad para todos los ámbitos de la vida, cuyo acceso y uso adecuado son imprescindibles para mejorar la cobertura, calidad, pertinencia y eficiencia de la educación y la calidad de vida de las personas; pero también pueden ser una fuente peligrosa de antivalores a los que están expuestas las personas de todas las edades, principalmente los niños y las niñas, siendo utilizadas también “muy eficientemente” para la guerra, para promover odio y violencia, el terrorismo, narcotráfico, crimen organizado, para hacer estafas ya no solo reales, sino también ciberestafas y cometer múltiples y diversos ciberdelitos.

UNA NUEVA EDUCACIÓN

Asimismo, la tendencia homogeneizante en el mundo es contraria a la necesaria diversidad y a la naturaleza y esencia multiétnica y pluricultural de la humanidad. Es importante conocer, respetar y aprender de las diferentes tradiciones y culturas del mundo, pero hacerlo con orgullo y dignidad, en lugar de ocultarlas, negarlas y hasta sentir vergüenza de ellas; cuando se trata más bien de rescatarlas, desarrollarlas, difundirlas y promoverlas. En otras palabras, abrirse al mundo, pero con orgullosa identidad, para promover en la práctica la Unidad en la Diversidad.


Es imprescindible no una mejor educación, sino una nueva educación, centrada no en la enseñanza, sino en el aprendizaje, que conlleva aprender a desaprender para reaprender.


Las crisis y conflictos en el mundo están también muchas veces relacionados a la lucha por el poder económico, político e incluso en el ámbito religioso.

El problema supremo que vive el mundo no es la falta de recursos, sino un problema de valores morales y humanos que, entre otras cosas, genera una enorme desigualdad social, de condiciones, oportunidades, etc. Y al igual que el cambio climático, afectan a toda la sociedad, sin distingos de ubicación geográfica, posición económica o social, color de piel, cultura, nivel académico, credo, religión o ideología; aunque, sin duda, sus causas y efectos son enormemente variables.

Antonio Guterres secretario general de la ONU, ha planteado el reto del mundo. RTVE
Antonio Guterres secretario general de la ONU, ha planteado el reto del mundo. RTVE

Basados en lo anterior, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la Agenda 2030, aprobados y suscritos en septiembre del 2015 por las 193 naciones en la Asamblea General de las Naciones Unidas, junto con las 169 metas propuestas, serán totalmente inalcanzables si no se cambia el modelo y orden de cosas en el mundo. Para lograrlo se requiere no una mejor educación, sino una nueva educación centrada no en la enseñanza, sino en el aprendizaje significativo que conlleva, entre otras cosas, aprender a desaprender para reaprender y a una educación integral que es diferente a la simple instrucción. A un papel del maestro o maestra no de trasmisor de conocimientos, sino de facilitador, mediador, promotor, motivador de aprendizajes, que incorpore los recursos virtuales.


Se necesita una educación integral, que es diferente a la simple instrucción.


La biotecnología, la nanotecnología, la infotecnología, la cognotecnología y la ciencia espacial son de gran valor para la salud, la educación, la ingeniería e infraestructura, el medio ambiente, la producción de alimentos sanos e inocuos y en las cantidades requeridas para alimentar al mundo, el comercio y los servicios, la comunicación y el intercambio cultural a nivel mundial, para la recreación, el buen vivir, etc.; pero, para que todo esto sea sostenible, se tiene que sustentar el desarrollo con sólidos valores humanos y una visión holística que nos permitan avanzar hacia una sociedad más justa, más equitativa, más solidaria, más pacífica, más sostenible y verdaderamente humana; de lo contrario, todo el avance científico y tecnológico ampliaría las ya enormes e inaceptables brechas de injusticia e inequidad existentes; por este camino llegaríamos a la singularidad tecnológica, donde las máquinas serían utilizadas para dominar al mundo, sojuzgando a las grandes mayorías de la sociedad.

Casino de Montecarlo, paradigma de riqueza y desigualdad. J.M. PAGADOR
Casino de Montecarlo, paradigma de riqueza y desigualdad. J.M. PAGADOR

En este sentido, es importante citar lo expresado por el Secretario General de la ONU, Antonio Guterres: “Debemos aprovechar el potencial de la Cuarta Revolución Industrial, y protegernos, al mismo tiempo, de los riesgos que plantea. Este es probablemente el reto más difícil que vamos a tener en las dos próximas décadas”.

Ya sea por razones religiosas, espirituales, políticas, ideológicas, económicas, sociales, o por cualquier otra, es necesario que el mundo cambie. Pero no basta con que cada uno, por la razón que sea, quiera o crea que el mundo debe cambiar; no, el cambio comienza con cada uno de nosotros y debe continuar a lo largo de nuestras vidas, a pesar de que, como lo dijo la Madre Teresa de Calcuta, “a veces sentimos que lo que hacemos es tan sólo una gota en el mar, pero el mar sería mucho menos si le faltara una gota”.

Según Obama, la desigualdad es corrosiva para la democracia. RTVE
Según Obama, la desigualdad es corrosiva para la democracia. RTVE

Si todo lo anterior era válido antes de la pandemia de la COVID-19, cuánto más lo será cuando finalice la misma, lo cual esperamos sea pronto.

Fe, optimismo, determinación, disciplina, responsabilidad, solidaridad, respeto, humildad, tolerancia, honestidad, alegría, son algunos elementos o valores que todos deberíamos fortalecer a diario.

Debes ser el cambio que deseas ver en el mundo” (Mahatma Gandhi). Porque el de los valores es el problema supremo de la Humanidad.

(Telémaco Talavera es Doctor Ingeniero Agrónomo, Rector Emérito de las Universidades Nacional Agraria y Nacional Autónoma de León (Nicaragua), Doctor Honoris Causa por las Universidades de Ciencias Agrícolas (Suecia) y Dubna International University (Rusia), entre otras, e investigador, escritor y articulista de prestigio internacional).

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