El paquete de 3,3 kilogramos de peso, enviado a través de SEUR el pasado 13 de diciembre de 2021, tenía que haber llegado a destino en 48 horas, pero no solo no llegó, sino que todavía no ha sido devuelto al remitente casi un mes después. La familia va a emprender acciones contra la empresa de paquetería, no ya por el valor del envío, sino por el trastorno causado a la destinataria y para que hechos como este no se repitan.
Cádiz.-
El 13 de diciembre de 2021 una familia de Cádiz envió un regalo de Navidad a una tía de 94 años que vive en Villasana de Mena (Burgos) a través de la agencia SEUR, en la confianza de que le llegaría puntualmente, en todo caso, antes de la Nochebuena. Pero no solo no fue así, sino que, 28 días después, el paquete, de un tamaño suficiente para no aducir extravío por ser demasiado pequeño, pues pesó 3,3 kilogramos y tenía unas dimensiones respetables, no solo no llegó a su destinataria, sino que todavía no ha sido devuelto a sus remitentes.
Un mes después de no haber efectuado la entrega, SEUR tampoco ha devuelto el paquete al remitente.
No se puede imputar error a los autores del envío, porque la dirección de entrega iba expresada correctamente y, además, se especificaron el teléfono fijo y el móvil de la destinataria. De hecho, el día 15 de diciembre alguien de SEUR llamó a esta señora para decirle que en la mañana de la fecha iban a hacerle entrega del paquete. La mujer permaneció todo el día en casa sin salir, pero el paquete no llegó. Y tampoco llegó en los días sucesivos, hasta hoy, cuando tampoco se sabe qué ha pasado con él.
Durante los 28 días que dura ya el sainete, en el seguimiento digital del envío ha constado que estaba “en camino”, pero nunca llegó. Incluso, teniendo correcta la dirección de la destinataria y habiendo hablado con ella para comunicarle la entrega, después no la hicieron y en el seguimiento empezaron a pedir “aportar solución”, como si la solución no fuese otra que hacer la entrega en la dirección indicada.
A pesar de diversas reclamaciones y numerosas llamadas de teléfono, SEUR sigue sin haber entregado el paquete y sin haberlo devuelto. “Lo peor de todo -dice la sobrina de la destinataria del envío- es que por culpa de SEUR hemos perturbado las Navidades de mi tía, y lo que iba a ser la agradable sorpresa de un regalo se convirtió para ella en el incordio de algo anunciado que no llegaba, pues ante la extrañeza de que no nos llamara para decirnos que había llegado, la llamamos nosotros, y así un día tras otro durante todas las Navidades. Es indignante. Y que SEUR no haya dado una explicación ni devuelto el paquete después de un mes, clama al cielo. Jamás volveremos a confiar un paquete a esta empresa”.
OTRAS INFORMACIONES
Miles de personas atrapadas en la nieve por culpa de un Gobierno irresponsable
ENDESA: velas a Dios y desprecio al cliente
La nevada de hoy reedita el colaPPso