A cuarenta y ocho horas de las elecciones andaluzas, los mensajes de campaña de Susana Díaz cada vez se ven más contraproducentes incluso para los propios socialistas. Los andaluces, cansados de que casi después de 40 años de gobiernos socialistas Andalucía siga estando a la cola de España y de Europa en casi todo, bromean con el eslogan de campaña de la presidenta “Más Andalucía”. “Preferimos más Finlandia o más Noruega y no más Andalucía como esta que nos dejan el chavismo, el griñanismo y el susanismo” dice un parado.
A 48 horas de la cita electoral andaluza se da por descontada (aunque no tanto como se creía al principio) la victoria de Susana Díaz, una victoria que se pronostica en todo caso pírrica (hay quien señala que todavía puede ganar la derecha), porque también se da por descontado que la presidenta perderá un significativo porcentaje de votos, lo que le hará muy difícil encontrar socios de gobierno para una mínima estabilidad, algo que a ella, según fuentes de su entorno político, le aterroriza.
Los parados andaluces, los dependientes, los enfermos, los estudiantes… no quieren “más Andalucía” como la del chavismo, el griñanismo y el susanismo.
El descontento ha aumentado enormemente en los últimos años en Andalucía, y no solo por la larga serie de escándalos de corrupción destapados –con sus infamantes desviaciones en drogas y puticlubs pagados con dinero público, que imprimen un vergonzoso grado de bajeza y cutrerío al asunto- sino, sobre todo, porque, tras esa larguísima etapa de administración “socialista”, Andalucía sigue siendo (con Extremadura) la última región de España en renta, desempleo, educación, asistencia sanitaria, etc. Las huelgas y manifestaciones de los últimos días protagonizadas por los médicos de atención primaria son un ejemplo del punto de degradación al que han llegado los servicios públicos andaluces que, como en el caso de la sanidad, solo funcionan gracias al enorme esfuerzo y dedicación de los profesionales sanitarios.
“Más Andalucía” –como reza la cartelería del susanismo en esta campaña- representa para muchos andaluces más miseria y más atraso. Y esa miseria y ese atraso, por una jugada traicionera del subconsciente del autor de la campaña, queda asociada a la imagen de la presidenta, que ni siquiera ha querido tener cerca las siglas del PSOE, borrando de las inmediaciones de su rostro toda referencia al partido al que pertenece.
SOCIALISTAS HARTOS TAMBIÉN
Son muchos los socialistas andaluces con los que hemos hablado en estos días previos a las elecciones. Unos dicen que votarán a Susana tapándose la nariz, “porque no sabemos si un gobierno de derechas será todavía peor”. Otros aseguran que, con gran dolor de su corazón, esta será la primera ocasión en sus vidas en que no votarán al PSOE. De estos últimos, unos se decantan por Adelante Andalucía, otros por Ciudadanos y otros directamente por la abstención. Entre ellos hay no pocos sanchistas, que en las primarias del partido andaluz obtuvieron el 30% de los votos, pero a los que Susana ha excluido absolutamente de las listas electorales. La venganza de no pocos de ellos será no votarla.
El ejemplo de Linares, una ciudad en la que Susana Díaz no se atreve a entrar, según publicaba hoy el diario El Mundo (https://www.elmundo.es/andalucia/2018/11/29/5bf96de246163f3a928b45f6.html), puede trasladarse a otras muchas ciudades y pueblos andaluces, donde la gente está más que harta.
“Más Andalucía así, como la que tenemos hoy, no, por favor, Susana”, se burlaba hoy, a 48 horas de las elecciones, un trabajador de mediana edad, en paro desde hace cuatro años, contemplando los carteles de Susana Díaz en una ciudad cualquiera de la comunidad. El autor del eslogan no ha estado muy inspirado, sea un profesional del marketing electoral o un subalterno de Susana o incluso la propia Susana, pues se dice que ella eligió personalmente esta fórmula sin PSOE. Un experto en publicidad política señala que “les ha traicionado el subconsciente, pues emiten un mensaje contrario al que querrían. Lo subliminal está ahí. Más Andalucía equivale a decir a día de hoy Más Andalucía fracasada y frustrada. Ella sola, identificando su imagen con la palabra Andalucía, como si la comunidad fuese ella, además de una expresión de ignorancia y soberbia, es un error monumental. Porque Andalucía sigue en el furgón de cola de España y de Europa después de cuatro décadas de ejecutivos “socialistas”, y esto se lo pueden hacer pagar muchos votantes, incluso los “afines”, el domingo.”
(José Mª Pagador es periodista y escritor, y fundador y director de PROPRONews. Su último libro publicado es la novela El Viaje del Tiburón – Caligrama Penguin Random House).
SOBRE EL AUTOR
José Mª Pagador y Rosa Puch, casi 100 años de periodismo
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