El campo extremeño, y el conjunto del campo español, ya no pueden más. Los precios del siglo XIX y los costes del XXI originan un suicidio económico insostenible por más tiempo. Trabajar a pérdidas es inconcebible en ningún sector productivo. Si el campo ha aguantado hasta ahora ha sido por un acúmulo de paciencia que ya se ha terminado. La rebelión empezó en Extremadura a finales de enero y se extendió por el resto de España. Ahora continúa en Extremadura de nuevo. El 18 de febrero la región se colapsará, según han anunciado los portavoces de las principales organizaciones agrarias de la región. Los cortes de carretera y los tractores impedirán que por Extremadura circulen otros vehículos que los esenciales, como las ambulancias.
Mérida.-
Las principales organizaciones agrarias de Extremadura convocan nuevas acciones de protesta, que tendrán lugar el próximo día 18 del actual mes de febrero, con cortes de las principales carreteras y autovías de la región entre las 10 y las 15 horas. Participarán en dichas acciones agricultores de dichas organizaciones, tanto a pie, como con tractores, en convocatorias que se pretende que sean masivas.
Los convocantes achacan al Gobierno y a su presidente la situación ya insostenible a que ha llegado el campo español, y le piden que no envíe a las fuerzas de seguridad del Estado, “cuyos miembros son hijos y nietos de agricultores y ganaderos extremeños y de otras regiones, a golpear a sus padres y abuelos” por una acción que consideran justa e imprescindible para hacerse oír y para que el Gobierno tome las medidas oportunas ante la situación gravísima de ruina que viven la agricultura y la ganadería españolas.